Justo cuando pensaba que era hora de imprimir todos esos recuerdos que guardaba en la nube de mi móvil y en mi disco duro (¡sí, mi disco duro lleno de fotos desde 2015!), me contactaron para la campaña del Día de la Madre de Cheerz. Todo parecía como una señal del destino. En ese disco duro guardo recuerdos que van desde los primeros años de Alejandro, cuando solo era un niño, hasta momentos más recientes con Estefanía. Es un archivo de mi vida, de momentos que no quiero perder jamás. La oportunidad de revelarlos y tenerlos en papel me llegó en el momento perfecto.

Esta colaboración fue… peculiar. Al principio me ofrecieron subir un video ya creado suyo a mi perfil, con enlace a TikTok Shop, sin recibir producto. Solo una comisión. Ya… como que no. No tengo millones de seguidores, pero tampoco soy una ONG, bonita. Entiendo que era una empresa nueva, que ya habían enviado muestras a otras influencers y no podían permitirse más, pero aún así… raro era.

Andrea es una de esas mujeres valientes que, pese a todo, decide emprender. Joven, con ilusión, ganas y mucho gusto, montó su propia tienda online de calzado para mujer. Producto español, fabricado en Alicante —el epicentro de la industria zapatera—, con modelos cómodos, bonitos y pensados para el día a día de mujeres reales. Me escribió para ver si me apetecía colaborar, y ya sabéis que soy fan incondicional de las pequeñas marcas. Y bueno… ¡Zapatos necesito igual! Así que era el combo perfecto.

Esta colaboración no fue formal, ya que Irene me mandó un regalo, pero quise aprovechar para dejar constancia de su increíble trabajo y todo lo que representa. Irene es una manicurista y tiktoker con casi medio millón de seguidores. Tiene su propia página web, eirebrushnails.com, donde vende cursos para aprender a hacerse la manicura en casa, una propuesta genial para las que queremos tener unas uñas de salón sin salir de casa.

Tuve la suerte de conocer a Maite, una joven emprendedora que acaba de ser mamá y que tiene su centro de estética, Tempo, en Valencia. Está en el barrio de Patraix, en Profesor Ángel La Calle, número 16. Es un centro pequeño, pero lleno de calidez y atención personalizada. Solo trabajan dos personas allí, y fue la chica que trabaja con Maite quien me atendió durante mi visita. Aunque no recuerdo su nombre, su trato fue excepcional. Súper simpática y muy profesional.

La siguiente colaboración fue con Borbolana, una marca española de Segorbe, llevada por una familia emprendedora que crea productos personalizados y hechos a mano. Su tienda online está llena de detalles pensados para regalar en comuniones, bautizos o simplemente para sorprender a alguien con algo único y especial.